Tres
Él, quepa... qué pasha?
Incondicional: me cojo la bici y en dos minuticos estoy en tu casa.
Capaz de sacar el jugo trascendental a la frase más obvia.
Él, versos de Sabina, platos exquisitos,
sentimental, bromista, buen partido.
Dos toques y me conecto, paciente.
Sustituye una noche de fiesta
por una noche en el workcenter ayudando a una amiga.
Ella, inconformista, obstinada, divertida.
Buscadora de lo auténtico,
no se conforma con menos.
Ella, la pseudo-rebelde, Coca-Cola light y peliculera.
Filmoteca regional, maestra de las definiciones exactas.
Jamás se casaría vestida de tarta (yo tampoco).
Nos gusta jugar al escondite.
Yo, entusiasta de las formas de ser.
Las ideas a veces se me escapan por no llevar un cuaderno cazamariposas en el bolso.
Se me ocurren asociaciones sorprendentes que hacen reír en momentos de tensión.
Yo, pacífica y sincera, y experta en sacar parecidos.
Me conmuevo con la música callejera.
Yo, buena de reflejos.
Tres exploradores incansables,
tres soñadores de un Dios que nos sueña,
tres cómicos de la legua,
tres filósofos incorregibles de las relaciones humanas.
Somos tres personas de este mundo,
que en un coche destrozado
quedamos monísimos vivos.